El archivo entregado por el escritor a su amigo y póstumo editor Max Brod para que lo destruyese deberá salir en dos semanas de 4 cajas de seguridad en Tel Aviv. Su interior es todavía una incógnita y los más optimistas creen que podría haber una novela inédita del autor checo. Ordenan a las herederas de Max Brod que entreguen el archivo de Kafka:
No se sabe exactamente qué hay en su interior: los estudiosos han hecho muchas hipótesis al respecto. Se habla de una novela desconocida hasta ahora, además de cartas, diarios e incluso borradores de obras nuevas. El diario Haaretz reveló hace un tiempo que las hijas de Esther Hoffe, secretaria de Max Brod depositaron en cajas fuertes de varis bancos de Tel Aviv "diarios, fotos, cartas y notas manuscritas de y sobre Kafka". Un juez israelí está por sacar del ostracismo a Kafka, o –por lo menos- todo lo que queda de él. El archivo que el autor dejó en su lecho de muerte a su amigo Max Brod, en 1922, para que lo destruyera, deberá dejar las cajas de seguridad donde reposa en Tel Aviv y ver la luz dentro de dos semanas. Nadie sabe qué hay adentro, lo único seguro es que supo guardar el original de El proceso, puesto que ese valorado manuscrito fue vendido en Londres en 1988 por 2 millones de libras esterlinas. Todo el resto es un misterio. Con la muerte de la secretaria de Brod, en 2008 se sucedió una batalla legal por los papeles que involucra a Israel y a Alemania que ahora podría por fin terminar. Hoffe no guardaba las cartas en un lugar demasiado seguro. De hecho, estaban en su casa con humedades y llena de gatos y perros. Recibió semejante tesoro de manos de Brod, exiliado en Israel y las guarda desde 1968 desde hace 40 años. Antes en 1961, Brod cedió una parte vital del archivo de Kafka a la Universidad de Oxford, debido a un requerimiento de los descendientes del autor de "La metamorfosis". El Estado de Israel analizó muchas veces secuestrar el botín de manuscritos, pero sólo le impidió a Hoffe vender las cartas al exterior, catalogando las cartas como un documento excepcional de la diáspora hebrea. Una vez, de hecho, la ex secretaria de Brod fue demorada en el aeropuerto de Ben Gurion mientras intentaba llevar a Suiza cartas y documentos. Fue un golpe duro para ella, tanto, que concedió al Archivo Nacional Israelí la posibilidad de catalogar la colección completa. El trabajo se hizo, pero nadie fuera de Israel pudo saber cuál era el contenido. No se podía asegurar a ciencia cierta si Frau Hoffe había entregado todo lo que tenía a disposición. Y, de hecho, la mujer sorprendió a todos cuando se vendió en Sotheby's el célebre manuscrito de El proceso por un valor millonario a un enviado del gobierno alemán. Cuando Hoffe falleció en 2008 se creía que el melodrama kafkiano terminaría con su muerte. Pero no fue así. Las cartas pasaron a sus hijas, que las sacaron del departamento plagado de humedad para llevarlas a un lugar más seguro e impenetrable, en cuatro cajas de seguridad en Tel Aviv y en otra en Zurich. Fue entonces cuando comenzaron los procesos judiciales. La Biblioteca Nacional de Israel sostuvo que la sucesión de Hoffe a sus hijas no era válida, porque en el testamento de Brod a favor de su ex secretaria se especificaba claramente que la mujer debía encontrar una sistematización óptima en archivos de acceso público. Las hijas de Hoffe se opusieron sosteniendo que Brod no había puesto límites en cuanto a una eventual venta al extranjero ni en cuanto a la posibilidad de transmitir por herencia el legado de Kafka. La causa judicial con la biblioteca se demoró entre apelaciones y recursos, hasta esta decisión. Sin embargo, no es una expropiación, aunque las dos hermanas Eva Hoffe y Ruth Wisler deben apurarse. Tienen poco tiempo para lograr un acuerdo económico con la biblioteca. En caso contrario, las cajas serán abiertas de oficio y el material catalogado otra vez. El suspenso crece, habrá una novela inédita de Kakfa como muchos creen. O al final no se descubrirá nada nuevo. La trama ya fue escrita por el mismo Kafka el 1922. Es la misma de El Castillo. El final, hasta ahora es el mismo, inconcluso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario